DeepSeek, la IA china de código abierto que desafía la hegemonía estadounidense
Pekín (EFE).- DeepSeek, la última alternativa china para el desarrollo de la inteligencia artificial (IA), está liderando las listas de descargas gracias a una innovadora apuesta por el código abierto, bajos costes y eficiencia, una irrupción inesperada que podría desafiar la supremacía de los modelos estadounidenses.
DeepSeek-R1 se ha situado en el primer puesto en las listas de descargas gratuitas de la tienda de aplicaciones móviles App Store tanto en China como en Estados Unidos, superando al popular ChatGPT.
Además, los futuros sobre los principales indicadores de Wall Street adelantan una apertura en negativo este lunes, con pérdidas superiores al 3 % para el índice Nasdaq, ante la irrupción de DeepSeek, cuyos avances desafían el liderazgo estadounidense.
Apuesta por el código abierto
El modelo que se está descargando estos días es el R1, lanzado el 20 de enero. Según los expertos, es comparable con el o1 de OpenAI, la firma creadora del ChatGPT, en la resolución de problemas matemáticos, la programación y la inferencia del lenguaje natural.
Detrás está DeepSeek, a su vez está respaldada por la empresa de inversión Huanfang Quant, revela hoy el periódico chino The Paper.
Su modelo es de código abierto, con lo que cualquier persona puede examinarlo, modificarlo y desarrollarlo en función de sus necesidades, algo que ha generado un notable impacto en la comunidad de desarrolladores, que destaca su eficiencia y bajo costo.
Respuesta a Estados Unidos
Algunas voces apuntan a que China busca que sus empresas ganen influencia global con este tipo de modelos para dar forma a los estándares y las prácticas internacionales de las IA, así como ganar mercado en los países en desarrollo.
Además, el lanzamiento se produce al tiempo que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciaba el proyecto ‘Stargate‘, que invertirá 500.000 millones de dólares en los próximos cuatro años para construir nuevos centros de datos para apoyar proyectos de IA.
EFE