El número de desplazados forzosos alcanza los 110 millones de personas
La agencia de la ONU para los refugiados pide una acción colectiva inmediata para aliviar la situación de personas en movilidad y señala los conflictos y la violencia como principal causa de los desplazamientos. Además, señalan en su último informe que el 76% de estas personas se encuentran en países de renta media y baja, por lo que piden un reparto más equitativo de la responsabilidad.
Bajo el título Tendencias mundiales de los desplazamientos forzosos 2022, este documento y principal informe anual de la agencia señala la guerra en Ucrania, los conflictos en otros lugares y los fenómenos climáticos como las principales causas de que millones de personas se vieran forzadas a abandonar sus hogares.
En una entrevista con Noticias ONU, el director adjunto de ACNUR, Giovanni Bassu, destacó que, tras un aumento de 19,1 millones de personas desplazadas respecto al año anterior, la cifra total alcanzó niveles récord en 2022.
“La verdad es que los números son bastante dramáticos. Hablamos de 108 millones de personas forzosamente desplazadas. Es el incremento anual más grande que hemos visto. Las cosas no están mejorando”.
Según el informe, la guerra de Ucrania fue la principal causa de desplazamiento en 2022. El número de refugiados de Ucrania pasó de 27.300 a finales de 2021 a 5,7 millones a finales de 2022, lo que representa la salida más rápida de refugiados de cualquier lugar del mundo desde la Segunda Guerra Mundial.
Por otra parte, las estimaciones para el número de refugiados procedentes de Afganistán fueron muy superiores a finales de 2022 debido a estimaciones revisadas de afganos acogidos en Irán, muchos de los cuales habían llegado en años anteriores.
En lo que va de año, la trayectoria ascendente de los desplazamientos forzosos a escala mundial no ha mostrado signos de desaceleración, ya que el estallido del conflicto en Sudán desencadenó nuevos flujos de salida, elevando el total mundial a unos 110 millones en mayo.
«Estas cifras nos muestran que algunas personas son demasiado rápidas para precipitarse al conflicto y demasiado lentas para encontrar soluciones. La consecuencia es devastación, desplazamiento y angustia para cada uno de los millones de personas desarraigadas por la fuerza de sus hogares» señaló el Alto Comisionado para los Refugiados. (ONU)